¿Qué es una API? y como funciona
Una API (siglas en inglés de «Application Programming Interface», o «Interfaz de Programación de Aplicaciones» en español) es un conjunto de protocolos, herramientas y definiciones que permiten a distintos sistemas y aplicaciones intercambiar datos y realizar funciones entre sí de manera automatizada.
¿Cómo funciona una API?
Un sistema o aplicación que quiera utilizar una API envía una solicitud a otro sistema o aplicación, que a su vez procesa esa solicitud y envía una respuesta de vuelta al sistema o aplicación que la solicitó. Estas solicitudes y respuestas suelen ser enviadas a través de Internet utilizando el protocolo HTTP (Hypertext Transfer Protocol).
Ejemplos de uso de APIs
Algunos ejemplos de cómo se pueden utilizar las APIs incluyen:
Integrar distintos servicios en una aplicación, como el inicio de sesión con Facebook o la visualización de mapas de Google en una aplicación de viajes.
Permitir a distintos sistemas compartir y utilizar datos entre sí, como cuando una aplicación de seguimiento de envíos consulta la ubicación de un paquete en una compañía de mensajería.
Automatizar tareas y procesos, como cuando una aplicación de gestión de proyectos utiliza una API para crear y asignar tareas a distintos usuarios.
Protocolos y formato de datos
Las APIs suelen utilizar el protocolo HTTP para enviar y recibir solicitudes y respuestas. Esto significa que las solicitudes y respuestas suelen tener un formato estándar que consiste en una cabecera (header) y un cuerpo (body).
La cabecera de una solicitud o respuesta HTTP suele incluir información sobre el tipo de contenido que se está enviando o recibiendo, la forma en que se ha codificado y el estado de la solicitud o respuesta.
El cuerpo de una solicitud o respuesta HTTP puede contener cualquier tipo de información, dependiendo del propósito de la solicitud o respuesta. Por ejemplo, puede ser una lista de productos o un formulario de inicio de sesión. Los datos en el cuerpo de una solicitud o respuesta suelen estar codificados en formato JSON (JavaScript Object Notation) o XML (eXtensible Markup Language).
Métodos HTTP
El protocolo HTTP define varios métodos que se pueden utilizar en las solicitudes de una API. Cada método tiene un propósito específico y se utiliza en distintos casos de uso. Algunos de los métodos más comunes son:
- GET: Se utiliza para solicitar información de un recurso específico. Por ejemplo, si quieres obtener la lista de productos de una tienda en línea, podrías enviar una solicitud GET a una URL como «api.tienda.com/productos».
- POST: Se utiliza para enviar información a un recurso para que sea procesada y almacenada. Por ejemplo, si quieres agregar un nuevo producto a la lista de una tienda en línea, podrías enviar una solicitud POST a una URL como «api.tienda.com/productos» con los detalles del producto en el cuerpo de la solicitud.
- PUT: Se utiliza para actualizar un recurso existente. Por ejemplo, si quieres modificar el precio de un producto en una tienda en línea, podrías enviar una solicitud PUT a una URL como «api.tienda.com/productos/123» con el nuevo precio en el cuerpo de la solicitud.
- DELETE: Se utiliza para eliminar un recurso existente. Por ejemplo, si quieres eliminar un producto de una tienda en línea, podrías enviar una solicitud DELETE a una URL como «api.tienda.com/productos/123».
Además de estos métodos, hay otros menos comunes como HEAD, OPTIONS y PATCH, que también se pueden utilizar en las solicitudes de una API.
Autenticación y autorización
En muchos casos, es necesario autenticar a los usuarios o sistemas que acceden a una API para asegurar que sólo se pueden realizar ciertas acciones o acceder a ciertos datos de manera autorizada. Esto se puede hacer utilizando distintos métodos de autenticación, como el envío de credenciales de inicio de sesión o el uso de tokens de acceso.
Además, es común que las APIs tengan distintos niveles de acceso o permisos, que determinan qué acciones o datos están disponibles para cada usuario o sistema. Por ejemplo, una API de una aplicación de gestión de proyectos podría permitir que algunos usuarios vean todos los proyectos y tareas, mientras que otros sólo puedan ver los proyectos y tareas a los que estén asignados.
Documentación y soporte
Para que una API sea fácil de usar, es importante que esté bien documentada. La documentación de una API suele incluir información sobre cómo funciona, qué datos y funciones están disponibles, cómo enviar solicitudes y procesar respuestas, y cómo autenticar y autorizar el acceso. Muchas APIs también ofrecen recursos de soporte, como foros o guías de inicio rápido, para ayudar a los desarrolladores a integrar y utilizar la API de manera efectiva.
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